miércoles, 27 de marzo de 2013

La joven australiana, Samantha Harris, se convierte en la primera modelo aborigen

Con 19 años y 1.80 de estatura, Samantha Harris, enamoró a los representantes de la moda.
Con una belleza inusual se convirtió en una de las modelos más solicitadas del momento, desfiló para 18 diseñadores de su país como: Lisa Ho, Lee Dion, Gilbert y Rachel Perry Alex, etc... en las pasarelas de Londres y Nueva York, y apareció en junio de 2010 en la mismísima portada de Vogue Australia.

Samantha nació en Tweed Heads, Australia, el 20 de Julio de 1990. De madre aborigen y padre alemán, se crió en el seno de una familia pobre, ya que llevaba la ropa de las tiendas de caridad, pero nunca renunció a su sueño de ser modelo. "Durante mi infancia me preguntaba porqué para tener éxito en la moda era necesario ser rubia de ojos azules, y ahora puedo decir que estoy orgullosa de que también una muchacha de mis características fisicas pueda hacer este trabajo. Mis rasgos aborígenes son muy importantes para mi y por eso quiero convertirme en un ejemplo para otras muchachas indígenas", declaró Harris.
Empezó a participar en competiciones de modelos de la marca de ropa op-shop, a la edad de 13 años y a los 15 años ya había recorrido la Semana de la Moda Mercedes en Sydney, la colección Primavera David Jones en Sydney y Melburne y los premios Lancome en Sydney. También fue seleccionada para participar en una sesión de fotos para Glamour en Nueva York y viajó a Bora Bora en Tahití para una sesión de fotos de Marie Clarie.

Corrieron rumores de que Harris se había sometido a tratamientos estéticos, comentaba el periódico italiano Corriere della Sera, pero estos fueron desmentidos. En Enero de 2011, Harris fue nombrada "Embajadora de las mujeres jóvenes de moda" para los grandes almacenes australianos, David Jones. Junto con Miranda Kerr y Gale Megan, Harris patrocinó la campaña de Primavera/Verano 2011/2012.

Harris consiguió que Vogue India dedicara un número a las mujeres morenas, para mostrar la belleza de esas pieles en un país donde muchas gastan su dinero en cremas aclarantes.


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